martes, 13 de agosto de 2013

Formación y empleabilidad para jóvenes de comunas...

Setenta jóvenes en situación de vulnerabilidad recibirán formación para luego ser vinculados laboralmente a diferentes almacenes de cadena como el Grupo Éxito y McDonald´s.

Los aprendices beneficiarios de este programa deben cumplir con requisitos como ser líderes juveniles en las comunas de la ciudad, pertenecer a los estratos 1, 2 y 3 y no estar vinculados al conflicto.
Ejercer un trabajo social y asegurar una pronta vinculación laboral, es el objetivo de la formación que reciben 70 jóvenes en situación de vulnerabilidad de las comunas 13 y 8 de esta ciudad y quienes –una vez terminada su formación– serán vinculados a la cadena Arcos Dorados - McDonald’s y al Grupo Éxito.
Esto se desprende de una alianza realizada entre la Alcaldía de Medellín, a través de su programa ‘Jóvenes por la vida’, y el programa ‘SENA en mi barrio’.
En total son 35 líderes de barrio los que se forman en el Centro Tecnológico del Mobiliario como técnicos en Recursos Humanos con énfasis en Servicio al Cliente, mientras que los demás, lo hacen como técnicos en Desarrollo de Operaciones Logísticas en Cadena de Abastecimiento.
Peter Valenzuela, aprendiz de Recursos Humanos y líder juvenil de la Comuna 13, explicó que “además de conseguir un empleo estable, la idea es multiplicar y replicar lo aprendido en esta formación en pro de la gente de los barrios, mirando su problemática y aportando soluciones que saquen a los jóvenes del conflicto con educación y trabajo”.

Los aprendices durante su etapa lectiva, trabajan medio tiempo con la administración municipal; allí devengan un subsidio para desarrollar actividades sociales, culturales y recreativas en zonas de tradición violenta. Los aprendices durante su etapa lectiva, trabajan medio tiempo con la administración municipal; allí devengan un subsidio para desarrollar actividades sociales, culturales y recreativas en zonas de tradición violenta; así son reconocidos en la comunidad como ‘multiplicadores de convivencia’.
Según Juliana Garcés, coordinadora de Convivencia del programa ‘Jóvenes por la vida’, de la Secretaría de Gobierno y Derechos Humanos de Medellín, “estos jóvenes que se han resistido a ser parte de las filas del conflicto, están recibiendo una gran oportunidad de formarse y tener una vinculación con importantes empresas”.
Se espera que para diciembre inicien la etapa práctica con altas probabilidades de ser contratados, según su rendimiento, pero sin abandonar sus proyectos sociales en pro de la legalidad en los barrios.