Setenta jóvenes en situación de
vulnerabilidad recibirán formación para luego ser vinculados laboralmente a diferentes
almacenes de cadena como el Grupo Éxito y McDonald´s.
Los
aprendices beneficiarios de este programa deben cumplir con requisitos como ser
líderes juveniles en las comunas de la ciudad, pertenecer a los estratos 1, 2 y
3 y no estar vinculados al conflicto.
Ejercer
un trabajo social y asegurar una pronta vinculación laboral, es el objetivo de
la formación que reciben 70 jóvenes en situación de vulnerabilidad de las
comunas 13 y 8 de esta ciudad y quienes –una vez terminada su formación– serán
vinculados a la cadena Arcos Dorados - McDonald’s y al Grupo Éxito.
Esto se
desprende de una alianza realizada entre la Alcaldía de Medellín, a través de
su programa ‘Jóvenes por la vida’, y el programa ‘SENA en mi barrio’.
En
total son 35 líderes de barrio los que se forman en el Centro Tecnológico del
Mobiliario como técnicos en Recursos Humanos con énfasis en Servicio al
Cliente, mientras que los demás, lo hacen como técnicos en Desarrollo de
Operaciones Logísticas en Cadena de Abastecimiento.
Peter
Valenzuela, aprendiz de Recursos Humanos y líder juvenil de la Comuna 13, explicó
que “además de conseguir un empleo estable, la idea es multiplicar y
replicar lo aprendido en esta formación en pro de la gente de los barrios,
mirando su problemática y aportando soluciones que saquen a los jóvenes del
conflicto con educación y trabajo”.
Los aprendices durante su etapa lectiva, trabajan medio tiempo con la administración municipal; allí devengan un subsidio para desarrollar actividades sociales, culturales y recreativas en zonas de tradición violenta. Los aprendices durante su etapa lectiva, trabajan medio tiempo con la administración municipal; allí devengan un subsidio para desarrollar actividades sociales, culturales y recreativas en zonas de tradición violenta; así son reconocidos en la comunidad como ‘multiplicadores de convivencia’.
Según
Juliana Garcés, coordinadora de Convivencia del programa
‘Jóvenes por la vida’, de la Secretaría de Gobierno y Derechos
Humanos de Medellín, “estos jóvenes que se han resistido a ser parte de las
filas del conflicto, están recibiendo una gran oportunidad de formarse y tener
una vinculación con importantes empresas”.
Se
espera que para diciembre inicien la etapa práctica con altas probabilidades de
ser contratados, según su rendimiento, pero sin abandonar sus proyectos
sociales en pro de la legalidad en los barrios.